¿ Pero a donde vamos?

Saltarina: Hola, soy una perrita de color blanca y marrón que todos llaman Saltarina, me gane este nombre a pulso, o mejor dicho a saltos, ya que cada persona que entra en el Refugio de Cambados, mi casa, le salto encima e intento que me acaricie un poco y juegue conmigo. Ya llevo aqui cuatro años, vine de muy pequeñita, siendo un bebe-perro y aquí me quede con Olga, Elena y todos los amigos que vienen todos los días a darnos de comer y a soltarnos un poco para poder correr y movernos, pero lo que quiero es tener una casa con “una familia” de verdad, un amigo, que me acaricie y que me saque a pasear y a jugar, no quiero decir que en el Refugio me traten mal, que no es así, veo que los animales nuevos que van llegando algunos vienen muy mal tratados, heridos, mal nutridos, enfermos y que sus amos ya les dejaron de querer, y tengo miedo que el amo que me escoja cuando vienen a vernos, no me quiera y me haga daño como a muchos otros perritos. Hoy es domingo, se que va a pasar algo muy importante, hay mucha gente nueva y ayer nos ducharon y peinaron a mi y a 25 amigos mas, y notaba que era de alguna forma mas especial que siempre, incluso a alguien se les escapaban lagrimas y eso es por algo. Hoy ha llegado gente con aparatos en las manos que hacen destellos y otros con algo colgado en los hombros en forma de caja y nos están apuntando a todos, hay un montón de jaulas en la puerta y llega una furgoneta grande con mas jaulas, la gente esta muy contenta y otros los que mas conocemos lloran mucho, y nos van dando besos y achuchones a cada uno que van metiendo en las jaulas, no se que pasa pero a mi ya no me dan ganas de saltar, tengo miedo de que me pase algo raro, Olga se pone a llorar desconsolada y me meten en una jaula y en la furgoneta, a mi me ponen al lado de la puerta en la parte de arriba, encima de un Lis, un perro de O Grove, que llego hace muy poco tiempo de color miel y muy guapo, cierran la puerta, se hace oscuro por un rato, la jaula tiene en el fondo un pañal que es muy cómodo y va a evitar que nos mojemos todos en caso de alguna fuga.

Esto se esta moviendo ¡¡¡¡¡¡ y ya no están mis amigos del Refugio¡¡¡¡  pero a donde vamos?.

Ya llevamos mucho tiempo en la furgoneta y a veces cuando se queda todo quieto, nos abren la puerta y nos miran muy fijamente, a los que gritan algo ó protestan los sacan a pasear un rato por turnos y nos dan agua en unos bebederos que tienen las jaulas, yo no protesto porque no quiero perder el tiempo en paseos, cuando todo se mueve yo duermo. El chico que se llama Fran me saca a pasear, hace mucho frio y llueve un poquito. Seguimos, creo que no volveremos a Cambados.

Gracias Olga, gracias Elena, gracias a todos los demás voluntarios del Refugio de Cambados por haberme cuidado tanto durante estos cuatro años y por seguir cuidando a los otros amigos que allí se quedaron, yo ya no voy a veros mas pero siempre que de saltos, pensare en vosotros y voy a saltar mas alto haber si llego a vuestro corazón. 
OS QUIERO.